El arte de enseñar es una obra dirigida a quienes van a enseñar, a quienes son nuevos en esto y a quienes quieren seguir siendo nuevos después de tanto tiempo. Se plantea en este libro una concepción de la enseñanza entendida como arte: el arte de convencer, que es bastante más difícil que tener razón. Para muchos es un terrible conflicto ser profesional de la enseñanza y no enseñar, o ser profesional del aprendizaje y no aprender. Nos preocupan los zoquetes, los que se sientan al otro lado de la diagonal. Esos a quienes pedimos en los exámenes que repitan lo mismo que les hemos dado, y los excluimos si no lo repiten y les hacemos repetir por no haberlo repetido. ¿Es esto preparar para la vida adulta? Nos preocupa la sobreabundancia de exámenes, que nos demuestran tozudamente que dar una asignatura no siempre mejora el conocimiento, tan solo garantiza el suministro.