La vida de Lope (monstruo de naturaleza) tuvo goces y sufrimientos, como la de todos más que las de muchos pero pocos fueron capaces como él de transformar en literatura esa vida llena de amoríos, problemas económicos, desengaños de poderosos, aspiraciones de medro social (frustradas siempre por la humildad de su nacimiento y por su escandalosa conducta) y tragedias personales como la muerte de su querido hijo Carlos o la fuga de su querida hija Antonia Clara con un seductor... Refugiado en su jardín con sus flores y sus recuerdos sigue escribiendo hasta su muerte los mejores versos que nunca escribió poeta alguno. En su entierro, cuenta Montalbán, "Las calles estaban tan pobladas de gente, que casi se embarazaba el paso al entierro, sin haber balcón ocioso, ventana desocupada ni coche vacío. Y así, viendo una mujer tanta grandeza, dijo con mucho donaire: Sin duda este entierro es de Lope, pues es tan bueno". Algunos episodios de su vida y algunos versos de su obra intenta recoger esta biografía que es a la vez un recuerdo de su espléndida poesía.