San Aurelio (825-27 de julio de 852), martirizado junto con su esposa Santa Natalia durante el califato de Abderramán II, es uno de los gloriosos 48 mártires de Córdoba. Conocemos su vida por la descripción que de Aurelio y Natalia hizo el presbítero San Eulogio de Córdoba, que les siguió en el martirio siete años después, en el año 859. La joya de su "acta de los mártires" se reproduce íntegramente en este libro. Y el agustino recoleto Jesús Alvarez Maestro ha sabido ambientar con sentido histórico esa breve biografía. En los capítulos precedentes siguiendo el hilo de la historia del cristianismo hispano, bajo la durísima dominación musulmana, traza los hitos de esa era de los mártires que, asistidos por el Espíritu, tuvieron la fortaleza de proclamar la soberanía de Jesucristo sobre cualquier otro que se tuviera como profeta. Aurelio, esposo y padre cristiano, unido a su santa esposa, se despojó de todo lo que tenía -una vez cubiertas las necesidades de sus hijos-, para cifrar su única riqueza en la fe de Jesucristo que, por el martirio, los llevó al cielo. Sólo Dios basta!