El presente volumen estudia las creencias religiosas, su origen y funciones, las pretensiones de validez y las relaciones con el saber filosófico y científico. Desde una postura receptiva a las críticas del ateísmo y del agnosticismo, el autor intenta mostrar la racionalidad y el carácter libre de las creencias, que no pueden ser demostradas, pero sí pueden ser defendibles. Son las razones de la fe ante la increencia desde una postura dialogante y abierta. Es de destacar el problema de la teodicea, al que se dedican varios trabajos en correlación con la pregunta filosófica sobre el sentido e inteligibilidad del mundo. El mal no es sólo un problema religioso, sino un obstáculo fundamental para las metafísicas de sentido que perduran hasta la actualidad. La toma de conciencia del carácter hipotético, interpretativo e incompleto del conocimiento, así como la crítica a la razón total -que no admite ningún ámbito que se escape a su dominio-, revaloriza a la creencia religiosa, aunque no haya respuestas racionales para todas la experiencias del mal. El autor examina también la ambigüedad de las imágenes de Dios que presenta el cristianismo a la luz de un desarrollo unilateral de la cristología como consecuencia de la helenización del cristianismo.