La Iglesia no ha inventado los sacramentos. Los ha recibido de su Fundador, Jesús. Cristo resucitado confía a su Iglesia los sacramentos. Los sacramentos son de la Iglesia y edifican la Iglesia. Ella los conserva como los canales por los que Dios sigue distribuyendo sus dones de vida divina. La Iglesia, guiada por el Espíritu, toma conciencia de los siete sacramentos a lo largo del tiempo, hasta llegar a precisar que entre sus celebraciones litúrgicas hay siete que son sacramentos instituidos por el Señor: Bautismo, Confirmación o Crismación, Eucaristía, Penitencia, Unción de los enfermos, Orden sacerdotal, Matrimonio. La Iglesia se presenta en medio del mundo también como el sacramento, el signo de la acción de Cristo que actúa en ella gracias a la misión del Espíritu Santo.