Con este volumen, el autor cierra la serie Hojas de Ruta. Después de pasar por El camino de la autodependencia, El camino del encuentro y El camino de las lágrimas, nos encontramos en el tramo final: El camino de la felicidad. A medida que el lector avance en la lectura irá comprobando que no es tan fácil ser feliz, que el texto no nos dice cómo ser felices, sino que nos induce a encontrar el camino. Nos habla de la ilusión, la fantasía, el deseo, la acción y el desafío de ser quien uno es. Por eso, el verdadero dilema de este recorrido está en la curva donde la felicidad depende de una búsqueda personal e intransferible, una postura de compromiso incondicional debemos tener con nuestra propia vida. El autor interroga al lector, lo cuestiona, pero a la vez le da algunas pistas para alcanzar su propio bienestar.