¿Es posible soñar con una civilización basada en el amor? Sólo si consideramos a cualquier persona como un hermano al que amar. Dice san Juan que "quien no ama a su hermano, a quien ve, no puede amar a Dios a quien no ve" (1 Jn 4, 20) Chiara Lubich "descubrió" que el amor cristiano a los hermanos, dirigido durante siglos sobre todo a los pobres y abandonados, puede abrirse en un horizonte infinito que abarca a cualquier persona, sea cual sea su situación social, su pertenencia política, cultural o religiosa. Mediante apuntes, páginas de diario, respuestas a preguntas, conferencias telefónicas o discursos, la autora comunica un camino de amor que es todo un "arte" que requiere un aprendizaje. Un camino que desarrolla una cultura propia con consecuencias económicas, sociales y políticas. Este libro forma parte de una serie para conocer de cerca los 12 puntos fundamentales del "carisma de la unidad", uno de los caminos espirituales más fecundos surgidos en el seno de la Iglesia en el último siglo.