Comunión y fraternidad

53º SEMANA NACIONAL DE VIDA CONSAGRADA La sustitución de los valores hondos del ser humano por estrategias de índole pragmática ha derivado en una sociedad que pondera el diálogo y la fusión, mientras produce fisión y polarización. Un mundo donde la Iglesia padece los virus que destruyen la comunión e impiden la fraternidad. La vida consagrada sufre en la actualidad el golpe de la cultura escéptica y narcisista, y por ello necesita repensar y reformular los principios que le sostienen e inspiran. La 53ª Semana Nacional para Institutos de Vida Consagrada se encuadra en este contexto desafiante, con el convencimiento de que el ideal comunional y fraterno constituye una irrenunciable seña de su identidad.